Selfies perrunos

Ya he regresado. Se terminaron las vacaciones y llega la “vuelta a la normalidad”, si es que se le puede llamar normalidad a mi vida cotidiana.

Camino hacia el Ibón de Piedrafita, Valle de Tena (Aragón)

Han sido tres semanas de viaje por el Norte de la península, cruzado des de Aragón hasta el extremo más occidental de Asturias. Por el camino, cientos de kilómetros de bosques, montañas, acantilados y sobretodo, mucha, mucha costa. Y es que no hay que olvidar que el punto de partida de este viaje empezó 7 u 8 años atrás, con la idea de dar la vuelta a la península Ibérica por la costa. Un viaje que se inició con idea de terminarlo en un mes, pero que como podéis ver, no solo se ha alargado en el tiempo, sino que también en sus partes. Esta ha sido la segunda. En algún momento tocará terminarla, pasando por la costa gallega y Portugal hasta llegar a Tarifa. Pero esta segunda parte no solamente trataba de continuar aquél viaje que tiempo atrás empezó como una manera de estrenarme en la conducción a través de un road trips in igual. Esta vez consistía, por encima de todo, en un viaje de jubilación perruna. Phoenix, mi siempre copiloto, se vuelve cada día más viejuno y no se si tendrá muchas más oportunidades de gozar de un viaje así, de modo que decidí regalarle este momento ahora que aún puede disfrutarlo.

Phoenix descansando a la sombra del hayedo. Selva de Irati (Navarra)

Y ha sido así. Phoenix ha cruzado hayedos, escalado por zonas montañosas, se ha bañado en ríos, lagos y cascadas, ha estado en las playas más bonitas del Norte y sobretodo, ha mordido palos. Muchos palos.

Ah si, y ha comido Cachopo!

Ascendiendo el Mendilatz (1348 m), Navarra

Esta entrada viene a ser un homenaje al Road Trip de Phoenix, la primera parte de su álbum de viajes. Quizás no sean fotones, ni siquiera el tipo de fotografía al que os tengo acostumbrados, pero espero que sus retratos os trasladen al momento y el lugar de cada una de ellas.

Observando el Castildetierra en las Bardenas Reales, Navarra

Lo se, el termino “selfie” también me da grima, y la mitad de estas fotos ni siquiera son selfies, puesto que para ello tendría que haberse autofotografiado el perro por su propia cuenta, pero el titulo quedaba muy molón y comercial.

Haciendo el de la caperucita roja y el lobo en la Sierra de Urbasa (Navarra)

Por si hay alguna duda al ver las imágenes, esta entrada tendrá una segunda parte (Selfies perrunos II), para mostraros la parte asturiana, donde hemos pasado un tercio del viaje.

Admirando la obra de Agustín Ibarrola: El bosque pintado de Oma (Euskadi)

5 comentarios en “Selfies perrunos”

  1. Pingback: Reflexiones sobre mi compañero en la vida – Marta Bretó Photography

  2. Fernando Arantegui

    Mi admirada fotógrafa y montañera Marta, modifica un poco el nombre de la foto en la que pones el ibón de Pedrafita en el valle de Pineta, está en el valle de Tena. Pineta está al mas al oeste.

    1. Hola Fernando, muchas gracias por pasarte a leer y por avisarme del error. La verdad es que no se como se me fue la castaña al localizar la foto, pues nunca he estado en el valle de Pineta (queda aún pendiente), sin embargo desde hace años organizo talleres en el valle de Tena, donde se perfectamente que está el ibón de Piedrafita, es más, es uno de los puntos que siempre visitamos, así que ya ves, ¡un megalapsus! Un saludo Fernando y te invito a pasarte por la nueva web (indomitus.eu) donde tengo información más actualizada 🙂

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